Un discípulo suplica a su viejo Maestro:
- ¡ Por favor, ayúdeme a vencer los límites de mi YO personal !
- ¿ Quieres que de verdad te ayude ? ¡Entonces vete de aquí ! ¡ Fuera !
- ¡ Pero lo necesito, Maestro ! ¿ Por qué me grita con tanta crueldad ?
- Observa con atención ...
En ese momento, un pájaro entra en el cuarto por un pequeño agujero que hay en un cristal roto. Enloquecido, vuela chocando contra las paredes, tratando de salir. El anciano espera a que el avecilla, extenuada, se pose cerca del pequeño agujero. De pronto lanza un fuerte grito y el pájaro se escapa por ahí.
- Este animal va a pensar siempre que el grito que le di era agresivo, malvado, feo, cruel. Sin embargo ese grito, es el que le ha dado la libertad ... Tú me pides que te libere cuando yo sé que eres tú mismo y sólo tú quien puede liberarse. Te irás, es posible que me detestes toda tu vida. Sin embargo te he enseñado que el primer acto para llegar a ti mismo es dejar de ser dependiente...
En estos momentos que todo mundo vuela como pájaro enloquecido, chocando contra los cristales; haz lo contrario. Detente, tómate un momento a solas, todo el tiempo necesario y observa a tu alrededor con atención. Siempre vas a encontrar un pequeño agujero en un cristal que te lleva a la libertad.
Te dejo de tarea esta frase:
Los problemas económicos no se resuelven con dinero; se resuelven con imaginación.